viernes, 25 de septiembre de 2009

Pauly living forever in a sky with diamonds

Seguro que este titulo le va a gustar, le hubiera puesto en vez de Pauly tal vez Penny, pero mejor que sepan de quien hablo; Rockera, jarocha, pambolera, chiva, blaugrana, con espíritu brit corriendo por cada gota de su sangre, buena conversadora, fan de Cortazar, buena cinéfila, guarra y alburera como buena jarocha, con hígado de albañil en 3 de mayo, buena doctora corazón, mejor amiga... no se, le debía un post, varios adjetivos no alcanzan a describirla, llevamos como tres años de conocernos, fue de las ultimas personas que conocí en Cholula fue gracias a Bertha, coincidimos en muchos gustos y sobre todo fuimos haciéndonos muy buenos amigos, debido sobre todo a la facilidad de carácter que tiene, recuerdo mucho sus "Roles" por Cholula y Puebla a altas horas de la madrugada o esas noches en que no había nada que hacer (ni siquiera dormir) cuando llegaba un mensaje al celular que decía "Paso por ti en 10 minutos" y de ahí a rolar por Cholula y sus calles oyendo música y platicando de todo lo que pasara por nuestras mentes, riéndonos de babosadas y recordando frases o escenas celebres de películas, chick flicks sobre todo, platicando de porque nos gustaban y que significaban para nosotros ciertos libros, canciones, frases, películas, grupos etc., ella me introdujo al mundo del indie británico al mundo de Oasis (nunca me canso de oír su anécdota de los dos ¿o tres? dias de borrachera que agarro con los Gallagher en el DF), gracias a ella conocí a Muse y Morrisey que se han vuelto de mis favoritos, llegamos a vivir juntos unos meses bastante divertidos, ahora es imposible oír "Live Forever" sin acordarme de ella, saber el significado de la misma y saber porque es tan importante para mucha gente, asi coma la importancia de los Gallagher en la música británica de finales de este milenio.
Un abrazo para la Pau y sus andanzas citadinas en las madrugadas, se extraña el rol nocturno mija.

martes, 22 de septiembre de 2009

Cafe, amigos, recuerdos...

Ayer por la tarde salí a tomar un café con una amiga, un ritual que intentamos preservar de nuestros últimos años en Puebla cuando pasábamos muchas horas perdiendo el tiempo y tratando de arreglar el mundo desde la mesa de un VIP´s con vista a los volcanes, siempre eramos los mismos Pau, Bertha y un servidor a veces se nos unía Victor, sin embargo nosotros tres siempre estábamos juntos, hace casi un año la vida se encargo de llevarnos por caminos separados Pau se fue a Xalapa y Bertha y Yo terminamos coincidiendo en Oaxaca, es con ella con quien trato de mantener el ritual del café, ahora ya no tratamos de arreglar el mundo, nuestra nueva empresa es menos pretenciosa pero no por eso mas fácil, ahora arreglamos nuestra vida amorosa lo cual significa que siempre habrá tiempo para el café y nunca habrá soluciones concretas, ayer en la mañana me encontré con Pau en el messenger y me pregunto por Bertha, le dije que habíamos quedado de un café y que cuando estuviéramos juntos le llamábamos para saludarla, la hora llego y tal cual habíamos prometido le llamamos a su cel hasta Xalapa, la conversión estuvo en altavoz para poder interactuar los tres, por una tarde y gracias a la tecnología y al buen crédito guardado pude volver a esas tardes de café en Puebla que terminaban en la madrugada cuando nos corrían del VIP´s, estuvimos conversando y poniéndonos al corriente de nuestras vidas, un año es mucho tiempo y las cosas cambian bastante, era sorprendente ver donde estábamos hace un año y a donde nos ha llevado la vida, hablamos de nuestros planes a futuro, esperando que alguno de esos nos encuentre a los tres en el mismo lugar por lo menos y volver a conversar como antaño, vimos que en cuestiones amorosas algunos papeles se intercambiaron pero en el fondo seguimos siendo los mismos de antes un poco soñadores, un poco optimistas, un mucho de humor negro, un poco despreocupados (o un mucho en mi caso), también queriendo ser felices y dando lata a pesar se todo, un saludo Pau, Tita y Vic una taza de café humeante los trae a mi mente cada tarde.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Bienvenida

Sucede que una tarde me sorprendió pensando en ti, no había motivo o razón aparente para hacerlo, la tarde se convirtió en noche y seguía pensándote, la certeza de lo que me pasaba me llego como un golpe... me sacudió... no era lo que buscaba o quería, bueno estas cosas llegan así nada mas... sin buscarlas, recuerdo muy bien el día que te conocí, debo confesar que quise pedirte tu teléfono o alguna forma de contactarte sin embargo me pareció bastante apresurado y atrevido, no quería echar a perder el momento, tampoco sabia mucho sobre ti pero me propuse llegar a conocerte, poco a poco el destino nos fue llevando a un camino mas cercano y en el cual nos ha permitido llegar a conocernos y convivir un poco mas, en este camino y contra lo que suelo ser o hacer he decidido ir con calma, no apresurarme y no apresurarte, hay tantas cosas que no se de ti y que supongo y entre esas esta el hecho de que presiento que para ti una relación en este momento sería como un pequeño obstáculo en tu camino ¿o tal vez has estado tanto tiempo sola que te da miedo una nueva relación? no lo sé con certeza, pero sé que yo también tengo mis dudas y mis miedos, sin embargo he decidido confrontarlos y hacerlos a un lado, tan solo por el placer de oír tu voz y pasar una tarde contigo, he decidido que vale la pena el esfuerzo de intentar algo aunque tenga que armarme de paciencia y valor, aunque tenga que cambiar muchas de mis prioridades, si al final de cuentas el premio es compartir nuestros momentos, vale la pena.

martes, 15 de septiembre de 2009

De las tardes de otoño

Estaba sentado frente a la computadora, escribiendo una historia que se me apareció hace algún tiempo y a la cual por fin he decidido darle forma, cuando me asalto un recuerdo (o varios a la vez), los recuerdos venían acompañados de una mezcla de sentimientos y pensé en sacarlos y compartir los de alguna manera.
Había dejado este blog en suspenso mas por circunstancias de la vida que por otra cosa, ha pasado casi un año desde la ultima vez que postee algo y en ese año han pasado muchas cosas también, ella (la ella de los post anteriores) ya regreso y ya esta haciendo su vida en otra ciudad y con otro acompañante, sin embargo el destino y el azar son caprichosos y yo que tengo un corazón de condominio no podía quedarme quieto, y así sin más apareció en mi vida otra mujer, una historia larga que, espero, haya oportunidad de comentar en algunas nuevas entregas del blog, sin embargo el hecho que me animo a escribir de nuevo no fue la nueva presencia en mi vida, o por lo menos no es el principal motivo, como comentaba arriba estaba escribiendo una historia y una parte de la misma transcurre en las tardes de otoño, cuando la noche empieza a caer sobre el valle de México y de los pueblos cercanos, recordé ese momento, cuando en alguna calle Cholulteca, cerca de la universidad o desde el patio o azotea de alguna de las tantas casas por las que pase en mis años en Puebla contemplaba como el sol se iba perdiendo poco a poco tras los volcanes, al tiempo que sentía en mi cuerpo el frió que anunciaba la cercanía del invierno, recordé que por alguna extraña razón que aun no alcanzo a dilucidar este momento de escasos 15 minutos es mi favorito del día, me trae recuerdos y me inunda de nostalgia y alegría a la vez, nostalgia porque extraño a los amigos, porque era el momento en que por fin habíamos terminado el día y solo nos quedaba planear la noche para divertirnos, nostalgia porque es un momento mágico que nos recuerda nuestra pequeñez frente al universo, ver que el sol se oculta tras los volcanes en un ritual que ha durado miles de años, ver a esos gigantes de piedra que siguen ahí, impasibles al paso del tiempo y las civilizaciones, un momento mágico que nos recuerda nuestra fragilidad ante el universo y la naturaleza, me inunda de nostalgia porque ese momento lo paso solo y a veces me gustaría compartirlo con alguien mas, pero también de alegría por la esperanza de que ese momento tan breve se repetirá al día siguiente con la promesa, ahora si, de que tal vez haya alguien con quien compartirlo.